Hace unas semanas que preparé esta receta y desde entonces quería enseñárosla, porque además hacía mucho que no publicaba una.
Como muchos ya sabréis, últimamente me me inspiro bastante en bloggers que publican recetas fit para mis comidas (Fit Happy Sisters, Vikika Fitness, Postres Saludables, Rosa Ballerina...), pero no porque quiera estar a dieta, que ni quiero ni me hace falta, ya que cuando se hace deporte no es necesario preocuparse por las calorías, aunque sí por lo que comemos ( estoy segura de que en parte mi lesión del año pasado tuvo que ver con la alimentación), así que, aunque siempre me he cuidado por el colesterol, ahora tengo más en cuenta todos los nutrientes y no como antes, que sólo me preocupaba de tomar hidratos el día que hacía deporte.
Esta receta la hice un domingo en el que no realicé nada de deporte, así que en lugar de usar placas de pasta, utilicé berenjenas.
Ingredientes (para una persona):
- Una berenjena
- 125 gr de carne picada de pollo
- Medio calabacín
- Media cebolleta
- Una cucharada de tomate concentrado o natural
- Bechamel de arroz ecológica Amandín (vino en una de las cajas de BiofitBox)
- Un poco de mozzarella
- Especias: orégano, pimienta...
- Ponemos el horno a calentar a 200ºC.
- Se corta la berenjena en vertical, haciendo lonchas finas y se ponen en una sartén con un poco de aceite (una gota extendida con una brocha o papel de cocina). Se hacen vuelta y vuelta hasta que se ablanden.
- Se trocean la cebolleta y el calabacín y se rehogan. Cuando estén blandas se añade la carne, el tomate y las especias.
- Rellenamos las tiras de berenjenas, hacemos un rollito y lo colocamos en la bandeja.
- Echamos la bechamel y espolvoreamos con la mozzarella. Metemos la bandeja al horno (yo pongo ventilador y calor abajo) hasta que veamos que el queso se gratina.
- Y ¡listo para comer! Se hace en un momento y está riquísimo. Espero que lo probéis y me contéis (yo he conseguido que Ruben coma verduras gracias a este tipo de recetas 😉)
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