Como siempre que llega la semana santa, abril ha sido un mes viajero y también de muchos contrastes, especialmente en el tiempo. 

Quizás lo más importante que me ha ocurrido este mes ha sido correr mi segundo medio maratón. Y como podéis ver en la foto acabé FELIZ. Las sensaciones fueron infinitamente mejores que en Lanzarote. (Me gustaría contároslo todos, las dos medias, en un post,pero necesito mucho tiempo para sentarme a escribir, porque va a ser largo 😅).

Semana Santa dio mucho de sí: me fui a Bolonia (una ciudad preciosa donde no me importaría irme a vivir; de hecho nos lo tomamos con mucha tranquilidad y además de andar mucho, comimos rico y barato, y hasta nos echamos la siesta 😜), visité a mi madre y me relajé en Valencia.

En mayo tengo previsto otro viaje con mi madre, pero el resto del mes se presenta tranquilo. Aun así, siempre hay buenos momentos para recordar. Si no queréis perderos nada mientras llega el próximo Instamoments, podéis seguirme en Instagram.