Medio año con África


A finales de diciembre os conté como habían sido los primeros meses con África (podéis leer el post aquí) y en un abrir y cerrar de ojos nos hemos plantado en el medio año, ¡el tiempo pasa muy deprisa!

Como os contaba al final del post, sufrimos la temida crisis de los tres meses a principios de diciembre, pero poco a poco se pasó. La Navidad la pasamos más o menos tranquila, sólo que cuando pasaba muchas horas despierta se ponía muy irritable. Con esta edad, alrededor de los cuatro meses, los bebés empiezan a cambiar el patrón  de sueño; empiezan a estar más horas despiertos (deben dormir entre 4 y 6 horas repartidas en tres siestas). En un principio, la regresión del sueño a África solo la afectó a las siestas; cada vez la costaba más dormirse y la única manera de conseguirlo fue en la habitación a oscuras y al pecho.


Esto duró unas cuatro semanas y dormía una o dos siestas por la mañana (normalmente en el carro, dando un paseo) y otra larga por la tarde, de unas 3 horas. Por la noche solía dormir desde las 23 hasta 10-11 de la mañana, con alguna toma entre medias, normalmente una o dos. Aunque este "privilegio" no duró mucho ya que hacia los 4 meses y medio empezó a despertarse mas frecuentemente, llegando incluso a tener que meterla en la cama, pues era la única manera que se dormía. Esta situación duró otras cuatro semanas. Junto a la regresión del sueño también la notamos mucho más dependiente de mí, sólo quería estar en brazos y principalmente conmigo.


Pero de repente un día empezó a dormir menos horas de siesta, lo que coincidió con que empezó a darse la vuelta. Y no se cómo, buscando información en internet (llegué a pensar que era un bebé de alta demanda), aparecí en una página que hablaba de las "semanas mágicas". Según esta teoría cuando los bebés están a punto de conseguir alguno de los hitos del desarrollo, pasan unas semanas un poco mal en las que duermen peor y son más dependientes de la madre, hasta que de repente un día, consiguen ese hito. Según los autores es algo cíclico. Y al igual que las crisis de crecimiento, algunos bebés lo pasan más desapercibido, pero los bebés más demandantes, como en el caso de África, lo acusan más.
Pues una vez empezó a darse la vuelta cambió todo muchísimo. Hasta ese momento incluso llegamos a preocuparnos porque nos daba la impresión de que durante el último mes no había avanzado nada nuevo. Pero todo lo que "no había conseguido" ese último mes empezó a hacerlo de golpe : girar de un lado a otro, reírse a carcajadas, interactuar en los juegos... Os aseguro que para nosotros, los 5 meses y medio supusieron un antes y un después.
Poco a poco el sueño también volvió a regularse y volvió a dormir en la cuna y casi del tirón. De hecho, estábamos preocupados por el "nuevo horario" de cara a la incorporación a la escuela infantil, pero un día ella sola y sin forzar, empezó a dormirse sobre las 20 (un día incluso. Alas 18:30) y despertarse a las 7, un horario perfecto para la nueva rutina.


El medio año coincidió con el inicio de la escuela infantil. Yo estaba un poco agobiada con este momento, pues la veía tan dependiente de mi que pensaba que lo iba a pasar fatal. Así que decidí cogerme un mes más de excedencia para poder hacer un periodo de adaptación y que las primeras semanas fuera solo por la mañana. Además, en el último momento decidí cambiar de escuela ya que encontré al lado de casa una pequeña escuela que trabaja con metodologías respetuosas y me inspiró mucha confianza, pues les duermen en mochila si lo ven necesario, respetan sus rutinas, están formadas en Baby Led Weaning... Y no se si gracias a esto o a que los niños se adaptan a todo, pero se adaptó perfectamente. Lloraba a la hora de la siesta, pero en una semana las profes consiguieron que durmiera en la hamaca media hora (cosa que a día de hoy yo aún no he conseguido) y hasta tomase un biberón pequeño de leche materna. La pena es que esto duro solo unos días, pues cuando empezamos la segunda semana se suspendieron las clases por la pandemia del coronavirus. Y aunque al principio mantuvo los horarios de sueño, poco a poco se la han vuelto a descuadrar y lleva unos días durmiendo otra vez fatal; no se si será por el confinamiento y los días que llevamos sin salir de casa o que está en una de las "semanas mágicas", pero quiero pensar que es otra etapa más y que cuando volvamos a la normalidad (que espero sea pronto 🤞🏻) volverá a dormir bien.


Una semana después de cumplir los seis meses también empezó a mantenerse sola sentada. Era el último requisito que nos faltaba para poder empezar con el Baby Led Weaning, pero quisimos esperar unos días más hasta que lo controlará bien, para empezar a darla de comer. Llevamos unos pocos días y no voy a profundizar en el tema, pero me gustaría escribir un post sobre ello más adelante.

En cuanto a la alergia a la proteína de leche, hicimos la provocación a mediados de marzo y tuvo vómitos; como cómo seguimos con lactancia materna exclusiva lo hicimos a través de la leche, tomando yo queso durante varios días. El mismo día ya la empezamos a notar irritable y aparecieron los vómitos y al tercer día, también un poco de sangre en las heces. Antes de la provocación también tuvimos cita con la alergologa quien la hizo tanto un prick (que salió negativo) como análisis de sangre, que salió con niveles muy bajos. Por lo tanto, como sigue teniendo síntomas digestivos, tiene una alergia no IgE mediada, que al menos los síntomas sin más leves que la mediada, pero con la que hay que tener cuidado igualmente.
Actualmente seguimos manteniendo revisiones telefónicas con la doctora del digestivo y en septiembre, cuando cumpla un año, volveremos a hacer la apruebas con la alergologa. No me quiero enrollar mucho con esto por aquí, pero si alguien tiene dudas puede preguntarme en los comentarios o mandarme un email.

Por último, me gustaría recordar el post que escribí sobre lo que teníamos antes de que naciera y hacer un poco recuento de los he nos ha sido útil y lo que no. 
De lo que puse en la lista hemos usado todo menos la minicuna; igual a otros bebés les encanta, pero a África no la gustó nada. Además, a mí me resultó incómoda al ser tan baja, por lo que al mes decidimos desmontarla y colocar la de Ikea en mi lado de la cama, haciéndole un apaño para convertirla en cuna de colecho, y junto con el nido, conseguimos que durmiera genial. Tampoco hemos usado mucho la bolsa para el carro. Al final nos ha resultado más cómodo una maletita que compré en AliExpress para llevar los pañales y cualquier bolso o mochila. La cuna de viaje que nos regalo mi madre para su casa, no la hemos usado mucho tampoco; solo las veces que he dormido en su casa, que no han sido muchas. Y en el único viaje que hemos hecho, aunque la llevamos, finalmente usamos el nido encima de una cama; quizás ahora que ya se mueve más nos resulte  más útil, pues es peligroso que duerma encima de una cama. Ya os contaré...
Otra cosa que hemos utilizado mucho ha sido la silla tripp trapp de stokke con el accesorio Newborn. Nos hicimos con ello al mes y el accesorio nos resultó muy cómodo para llevarla de una habitación a otra, poniéndola tanto en el suelo, como en la encimera, el sofá ...siempre bajo vigilancia. Y una vez empezó a moverse más, anclado a la silla. Ahora, desde que se sienta, lo hemos cambiado por el baby set y la bandeja, para convertirla en trona. Tanto la silla como el Newborn set los cogimos en wallapop. El resto de accesorios al estar en orina cuarentena tuvimos que comprarlos online en el corte inglés.

Os seguiré contando más avances de África en los próximos meses. Podéis seguirme en Instagram donde os enseño alguna cosa y dónde he creado además una historia destacada donde iré guardando stories sobre BLW.

Las que tenéis bebés, ¿Como fueron estos meses con vuestros peques? ¿Cuando empezaron a mantenerse sentados? ¿Hicisteis BLW o papillas? ¡Contadme!

Leyre Alcalde

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